Como en cada presentación del elenco del Teatro Vocacional Candilejas, encuentra la receptividad por parte del público, la noche del viernes volvió a emocionar a los espectadores que colmaron la Sala Luis Horacio Carbone.
Una obra que interpelo en todo momento al espectador para descubrir el mensaje, valiéndose de la combinación de los géneros teatrales del grotesco (exhibe el rostro obsceno de toda realidad, devela las máscaras, evoca a la vez lo trágico y lo cómico, apela a la risa que se ahoga al nacer entre la angustia o el dolor.) y el absurdo (tiene fuertes rasgos existencialistas y cuestiona la sociedad y al humano. A través del humor y la mitificación escondían una actitud muy exigente hacia su arte. La incoherencia, el disparate y lo ilógico son también rasgos muy representativos de estas obras en comunes.), combinación que permitió descubrir situaciones disparatadas que mantuvieron en vilo durante toda la obra, incluso permitiendo el análisis de sentimientos y valores, como la fidelidad, el amor, la familia, en definitiva, todas situaciones que ayudan desde la escenificación encontrar similitud con las vivencias personales.
Una impecable puesta en escena de su director, excelentes momentos de juegos teatrales, incluyendo un movimiento corporal de manera integral, que ha sabido arrancar los aplausos de los espectadores.
Vale la pena ir al teatro, con esta modalidad de función a la gorra, la oportunidad el domingo desde las 20 horas