CHOQUE EN CADENA Y CAOS EN EL PUENTE: El camionero quedó preso y la única víctima tenía legajo policial
Juan "Pirulo" Pérez resultó tener antecedentes de hurtos en Resistencia y Corrientes. La familia pidió dinero para el sepelio. Pérez se llevó la peor parte, sin salida y se dio de lleno contra uno de los siete autos que impactó el camión sin control, en la bajada del Puente Belgrano.
La orden de detención contra el camionero Nahuel Ruiz llegó con el peso de una singular fatalidad. Horas después del choque en cadena que paralizó al puente General Manuel Belgrano, la Justicia chaqueña decidió imputarlo por homicidio culposo cuando aún resuena el eco lúgubre del metal retorcido. La víctima, Juan Carlos Pérez, un motociclista de 57 años, había sucumbido a sus heridas en el Hospital Escuela de la ciudad de Corrientes a última hora del viernes. El resto de las personas, dos hombres y una mujer, recibieron el alta esa misma noche, aunque las imágenes parecían indicar una gravedad muchísimo mayor.
Pérez se llevó la peor parte, sin salida se estampilló de lleno contra uno de los siete autos que impactó el camión sin control.
La comunidad, conmovida por los videos del rescate que circulaban en las redes sociales, sintió el impacto y empatía por la familia de la víctima, quienes pidieron ayuda económica para el sepelio. Se lo retrató como un hombre que, como tantos otros, cruzaba el viaducto en su rutina diaria para ir trabajar, sin saber que el destino lo esperaba en el pronunciado descenso al barrio San Pedro Pescador, del lado chaqueño. La versión inicial fue ayer cuestionada y desmentida, tanto en las redes como el archivo periodístico. Y es que a Pérez se lo conocía por su alias, "Pirulo", un delincuente con al menos tres arrestos registrados y un modo de operar habitual: pasar de Corrientes a Resistencia para delinquir una vez que su cara se volvió demasiado famosa para Policía correntina.
Ruiz, camionero de 26 años y oriundo de Santa Fe, había sido identificado rápidamente como el presunto responsable de un desastre que no sólo interrumpió la circulación entre provincias, sino que también arrancó una vida. El chofer fue grabado en un video reconociendo que se quedó sin frenos del camión Volvo que conducía y se llevó puesto "un kilómetro de autos". Por orden del fiscal del caso, Víctor Recio, quedó detenido una vez certificada la defunción de Pérez, quien se desplazaba en una Zanella ZB, y de momento el dato de los antecedentes penales del mismo no influyen en la responsabilidad penal del camionero.
Analía, la esposa de "Pirulo", se había convertido en la voz de un sufrimiento, sollozando por la angustia, relató que su esposo se dirigía a trabajar a una verdulería en Resistencia, un viaje que realizaba a diario. "Salió de casa como todos los días para ir a trabajar. No teníamos idea de lo que había pasado hasta que nos llamaron del hospital," había dicho. Su testimonio pintaba el cuadro de un hombre de familia, un trabajador honesto, cuyo único pecado fue encontrarse en el lugar equivocado en el momento menos afortunado.
La descripción de las heridas de Juan Carlos, con "todo complicado, hígado, riñón, todas las costillas rotas, la pelvis," intensificaba la tragedia.
Sin embargo, el guion de esta historia de dolor y luto comenzó a resquebrajarse. La investigación policial, ajena a los relatos familiares y a la conmoción de las redes, empezó a develar una verdad que nadie esperaba. El hombre de la motocicleta, el trabajador que iba a la verdulería, no era quien la familia había dicho. Pérez, quién había perdido la vida de un modo tan atroz, era conocido en el bajo mundo del delito como "Pirulo." Las autoridades chaqueñas revelaron que el hombre era un delincuente con un largo historial de hurtos, con antecedentes que se remontaban hasta el 2013 e incluso más atrás y que lo habían llevado en varias ocasiones a la cárcel por atentar contra la propiedad privada, valiéndose de la modalidad hurto mayoritariamente, e incluso usando a sus hijas menores de edad para cometer sustracciones de celulares, billeteras y demás objetos de valor en escribanías y comercios céntricos, primero Corrientes luego en Resistencia.
El prontuario delictivo puesto al descubierto tras una de las noches más caóticas del año, en el marco de reiterados embotellamientos en una zona con importante flujo vehicular y las obras de reparación, cayó como una bomba en la opinión pública y las redes sociales; ese caldero de opiniones y juicios se encendieron. La figura del trabajador inocente se desvaneció para dar paso a la de un ladrón y las razones de su viaje a Resistencia tomaron un giro macabro.
La información provista por la Policía del Chaco era contundente. "Pirulo" se había especializado en robar en oficinas, estudios jurídicos, contables y escribanías, haciéndose pasar por un falso cliente para apoderarse de celulares, carteras y dinero en efectivo. Su modus operandi era tan audaz como su itinerario delictivo: cruzar el puente para cometer sus fechorías. Al punto que el año pasado el jefe de la Policía chaqueña, Fernando Romero, había sido explícito sobre los métodos del delincuente, quien quedó grabado en cámara de vigilancia. "Lo vamos a buscar hasta debajo la cama," había advertido en octubre de 2024 tras el hurto de la billetera de una abogada tras hacerse pasar por cliente y a los pocos días fue localizado en Corrientes y llevado a Chaco, pero menos de un año después ya estaba libre y así lo encontró la muerte, llorada y también celebrada por la gente.s