La economía familiar en Corrientes volvió a mostrar señales de tensión durante octubre. Según el Informe N.º 65 del Índice Barrial de Precios (IBP), elaborado por el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci), la Canasta Básica Total (CBT) -que mide los gastos de alimentos y servicios esenciales- registró un incremento mensual del 2,95 %, el mismo porcentaje que la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marca el límite de la indigencia.
La variación, que implica una aceleración respecto de meses previos, fue interpretada por los equipos técnicos como un indicador de posible rebrote inflacionario, especialmente en alimentos frescos.
Para una familia tipo de dos adultos y dos niños, superar la línea de pobreza en octubre requirió $ 1.002.184,10, mientras que para no caer en la indigencia se necesitaron $ 439.554,43 solo en alimentos. El relevamiento se realizó en más de 300 comercios de seis localidades: Corrientes Capital, Empedrado, Goya, Santa Rosa, Curuzú Cuatiá y Paso de la Patria.
Aunque el año 2025 venía mostrando incrementos más moderados que en períodos anteriores, la suba de octubre quebró esa tendencia. El informe señala que, de diciembre a octubre, ambas canastas crecieron 10,66 %, y que en la comparación anual frente a octubre de 2024 la CBT avanzó 13,18 % y la CBA 11,70 %. Son porcentajes notablemente inferiores a los de años de inflación alta, pero la aceleración puntual del último mes preocupa por su impacto inmediato sobre los hogares.
Por rubros, la verdulería fue la que más presionó sobre el índice mensual, con una suba del 5,06 %. Los incrementos más notorios se dieron en frutas y verduras de consumo cotidiano: la pera subió 25 %, la zanahoria 20 %, la acelga 14,29 %, la manzana 13,64 % y la lechuga 12 %.
Le siguió el rubro carnicería, con un alza del 2,84 % y aumentos en cortes como hígado (15 %), asado (11,11 %), nalga (10 %), carne picada (7,14 %) y paleta (6,46 %).
En tanto, el almacén aumentó 2,17 %, pero con subas fuertes en productos puntuales: salame (+35 %), paleta cocida (+28,21 %), dulce de leche (+25 %), arvejas (+14,29 %) y puré de tomate (+11 %).
A pesar de que la variación anual muestra una inflación relativamente contenida, los técnicos remarcan que el impacto sobre las economías familiares sigue siendo severo debido a la combinación de ingresos congelados, caída del consumo, aumento de costos de servicios y un mercado laboral deteriorado.
La directora del Isepci Corrientes, Silvana Lagraña, afirmó que los incrementos en la CBT "se sostienen por las políticas regresivas del gobierno nacional, que implicaron quita de subsidios en transporte y energía, y que se trasladan a precios". A esto se suma la presión de los alquileres y combustibles, factores que afectan especialmente a las familias de ingresos bajos y medios.
Lagraña subrayó además que el contexto general es "de endeudamiento creciente, informalidad laboral en alza y pérdida de empleo formal desde hace dos años". Según el informe, el estancamiento en el mercado laboral y el deterioro del poder adquisitivo intensifican la vulnerabilidad de miles de hogares correntinos.
El primer semestre de 2025 registró un incremento del desempleo y un avance sostenido del trabajo informal, lo que dificulta cualquier recuperación del consumo esencial.
El Isepci volvió a reclamar que se replanteen las políticas económicas, con foco en la mejora de ingresos, la recuperación del empleo formal y el fortalecimiento de las Pymes, a las que consideran "las principales generadoras de trabajo y también las más perjudicadas por el ajuste".
En ese marco, el dato del 2,95 % mensual se convierte en un llamado de atención. No solo por el número en sí, sino porque aparece luego de varios meses de relativa estabilidad.
Crece la presión inflacionaria en la canasta básica en Corrientes
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