Corrientes lanza el plan provincial de prevención del dengue y arbovirosis
En el marco del lanzamiento anual del Programa Provincial de Prevención y Control del Dengue, la directora de Epidemiología de Corrientes, Angelina Bobadilla, destacó la continuidad de las estrategias que han demostrado eficacia en ciclos epidémicos previos.
"Estamos en un día de lanzamiento del plan provincial de prevención y control de dengue y de las otras armovirosis. Así que como cada año hacemos este lanzamiento oficial en donde se vuelven a renovar todos los esfuerzos para trabajar en este nuevo ciclo epidémico", señaló.
El plan se caracteriza por integrar acciones en terreno, mantener alianzas estratégicas y sumar nuevas tecnologías, incluyendo la inteligencia artificial, para fortalecer la vigilancia epidemiológica.
Bobadilla explicó que, aunque la esencia del plan permanece inalterable, se incorporan detalles que permiten optimizar la estrategia. "Muchas de las estrategias no se las pueden modificar, que son estrategias en terreno, pero siempre hay algún detalle, alguna modificación que tiene que ver con la incorporación de la inteligencia artificial, de estimaciones, hay nuevas tecnologías que se van incorporando, nuevas metodologías de vigilancia epidemiológica", indicó. Esta combinación de continuidad y adaptación asegura que la provincia pueda anticiparse a posibles brotes y mitigar su impacto desde etapas tempranas.
El programa provincial se organiza sobre ejes fundamentales que incluyen prevención, vigilancia epidemiológica y control del paciente. "Los ejes tienen que ver con la prevención, con la vigilancia epidemiológica, todo lo que tiene que ver con el control clínico del paciente, el diagnóstico temprano precoz para poder adelantarnos siempre a lo que va a pasar para estar siempre al inicio de un brote", detalló. La planificación estratégica permite actuar de manera focalizada en cada ciclo epidémico, potenciando la capacidad de respuesta frente a la aparición de casos de dengue y otras arbovirosis.
PREVENCIÓN Y VIGILANCIA
La directora de Epidemiología enfatizó la importancia de la vigilancia intensificada y de las intervenciones preventivas para controlar la proliferación del mosquito transmisor. "Hoy estamos en esa vigilancia intensificada, en esa estrategia de control interbrote que tiene que ver con el control focal, con la eliminación de los criaderos, seguir con las campañas de vacunación", explicó.
Según indicó, la identificación temprana de los primeros casos es clave para mitigar el impacto del brote y garantizar que la población se mantenga protegida.
Sobre la situación actual en la provincia, Bobadilla indicó que hasta el momento no se han registrado diagnósticos positivos significativos, aunque se observa la presencia de mosquitos en algunas viviendas. "Sí, hasta ahora venimos bien. No hay diagnóstico de… si bien todos los síndromes febriles se estudian, si tenemos que trabajar en domicilio esa es la tarea ahora. Hasta que no llegue el brote la estrategia fuerte es la prevención, el ordenamiento ambiental, la eliminación de los criaderos", detalló.
En relación con la vacunación, la provincia mantiene vigente el esquema de dos dosis dirigido a personas de entre 15 y 59 años. "Continuamos con el esquema de vacunación, el esquema de dos dosis, de cero a tres meses, que hoy se pone la primera dosis, y a los tres meses la segunda, así que estamos en esa etapa", afirmó Bobadilla. La combinación de vacunación, control ambiental y educación comunitaria forma un conjunto de medidas preventivas que buscan reducir la incidencia de la enfermedad y limitar su propagación.
CONTEXTO LOCAL Y GLOBAL
Corrientes se encuentra actualmente en una situación favorable dentro del mapa epidemiológico nacional, gracias al trabajo sostenido de redes sanitarias locales y al compromiso de la comunidad. "Estamos en una situación bien esperable por todo el trabajo que se viene realizando. Esto no tiene que ver con la magia o con las generaciones puntuales, sino con el trabajo de los socios y estas grandes redes que se han armado en la provincia", precisó Bobadilla.
No obstante, la funcionaria recordó que factores como el cambio climático, la variabilidad de las lluvias y el incremento de las temperaturas pueden modificar el riesgo de brotes.
La heterogeneidad en la percepción de riesgo y el control de criaderos en los domicilios sigue siendo un desafío, ya que no todas las familias mantienen las mismas medidas preventivas. "Todavía no tenemos el 100% de ese cuidado y de esa percepción de riesgo que nos tendría que poner en una situación de estar más tranquilos", indicó.
El uso de repelentes personales se mantiene como una herramienta eficaz dentro del kit de prevención. "Sí, el repelente es una de las medidas más efectivas, el ordenamiento ambiental siempre, primero y al lado va el repelente. Si yo me voy a movilizar, si voy a viajar a zonas endémicas, tengo que llevar repelente", destacó.
La directora recomendó su uso permanente, especialmente en períodos de alta actividad del mosquito, reforzando la combinación de medidas ambientales, educativas y médicas para prevenir contagios.